"No puede seguir esperándose soluciones de otros lados si los
perjudicados con nuestros vecinos" señaló el Alcalde de LICANTÉN Marcelo
Fernández Vilos.
Con algo de incomodidad tanto los vecinos de Rancura como los pescadores de
Duao, han señalado hitos de problemas sanitarios en la costa que se arrastran
por bastante tiempo y que en período estival se hacen más evidentes. El
primero es la situación en Rancura, en donde la Municipalidad ha buscado
soluciones y por lo pronto ha realizado trabajos paleativos de un
alcantarillado que colapsó por mal diseño.
"Al respecto se va a diseñar una solución definitiva, ya que a pesar
de estar hace sólo dos meses de gestión municipal, tenemos la férrea intención
de terminar con un problema de la comunidad, denunciado y que no encontró eco
en las gestiones anteriores, ya que las familias de Rancura no pueden seguir
esperando", dijo enfático el Alcalde.
En relación a lo que sucede en la Caleta Duao, se deja en claro que la
administración de la planta de tratamiento está bajo la supervisión del
Ministerio de Economía, no obstante en coordinación con la administración de la
caleta Duao que solicitó alguna intervención a través de los medios de
comunicación, se ha determinado el levantamiento del estanque y el
financiamiento de un camión limpiafosas que ya se encargó de la parte más
complicada. "Cuando se nos solicitó intervención, acudimos de
inmediato en la medida de nuestras fuerzas, que no son muchas. Debe
entenderse que esta caleta en su parte operativa depende de una repartición del
Estado, pero si está en la Municipalidad de LICANTÉN dar alguna solución, se
hará. Ahora se ha coordinado con el encargado de proyectos de CORFO y
SEREMI de Economía un proyecto final de solución", agregó Fernández Vilos
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