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Nuevosur invirtió $350 millones
en reponer estanque de agua potable destruido en el terremoto, aumentando
capacidad para mejorar el servicio.
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Con la finalidad de conocer la nueva infraestructura que
provee de agua potable a la localidad de Lontué, la alcaldesa de Molina,
Priscilla Castillo, junto a la subgerente zonal de Nuevosur, Ana María
Cisternas, realizaron una visita a las obras de reposición del estanque, que
resultó severamente dañado por el terremoto de 2010.
Durante la visita, la ejecutiva de Nuevosur comentó a la
máxima autoridad comunal que a mediados de 2011 comenzó la construcción del
estanque de hormigón armado elevado con capacidad de 400 metros cúbicos y una
altura total de 21 metros. Todo con una inversión superior a los 350 millones
de pesos.
“Esta nueva estructura representa una capacidad superior
respecto al estanque anterior permitiendo mejorar el servicio y considerando el
aumento de demanda previsto para los próximos años”, precisó Ana María
Cisternas.
Las obras concluyeron a fines de 2012 y fue a fines de ese
mismo año que entró en operaciones en la localidad de Lontué.
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